Descubre el Secretariado de pastoral penitenciaria a través del testimonio de dos voluntarios

 In Noticias HOME, Prensa, Prensa - Escrita

Los voluntarios del Secretariado diocesano de pastoral penitenciaria (SEPAP), Manel Pou y Glòria Pérez, explican su testimonio en las prisiones

 

Manel Pou y Glòria Pérez son dos voluntarios del Secretariado diocesano de pastoral penitenciaria (SEPAP) que llevan a cabo su tarea en el Centro Penitenciario de Mujeres de Barcelona de Wad-Ras.

Manel Pou venía a hacer un proyecto llamado Espacio de Paz donde se acogía a las prisioneras, se las escuchaba y se les daba un poco de paz tal como dice Pou: «rogando, cantando, llorando y abrazándonos». Un proyecto que quedó parado por la pandemia y que Pou espera que pueda volver a iniciarse pronto. Por otro lado, Glòria Pérez hace 22 años que va a la prisión y todo empezó porque sus alumnos la interpelaron a ir, desde entonces no ha parado su voluntariado que siempre se ha centrado en aquello que sabe hacer, que es dar clases, sobre todo de catalán y castellano. Para Pérez «las clases son muy importantes, no tanto por los contenidos, sino por este rato donde las prisioneras se ven atendidas». Las prisioneras de Wad-Ras, según la voluntaria han servido porque «se han dado cuenta que la prisión no solo las privaba de libertad sino que les daba unas herramientas para poderse reinsertar».

«Hay que acompañar sin juzgar»

«Tenemos que presentar la Iglesia de las bienaventuranzas, la que está cerca de los que peor lo tienen que en este caso son los prisioneros» ha asegurado Pou. «Es importante que la Iglesia continúe haciendo esta acción social para reafirmar que Jesús está siempre con ellos». Por otro lado, Glòria Pérez ha afirmado que «se tiene que perdonar, se tienen que romper las barreras y para conseguirlo hay que acompañar sin juzgar y en esto el Evangelio nos lo dice muy claro. Tenemos que estar cerca, tenemos que mirar con ojos de amor a todas estas personas».

Para colaborar con las personas encarceladas la Glòria Pérez lo tiene claro: «Primero tenemos que mirar con amor a las prisioneras. La Iglesia tiene que mostrar con obras lo que es el Evangelio: estar cerca del que lo necesita».

Recent Posts

Leave a Comment

Start typing and press Enter to search